Aprender y Enseñar en la Era Digital
De los Sistemas educativos a la Sociedad del aprendizaje
Ya
en el año 2010 el denominado Informe Cisco sostenía que la
Educación y la Tecnología iban a ser los dos grandes ecualizadores
en la vida de los próximos años. Y así está sucediendo. La
educación y la tecnología van de la mano con la red que sirve de
plataforma para lo que denominamos sociedad del aprendizaje.
Su idea de partida es que el aprendizaje es fundamental para el
progreso actual de la humanidad, para la prosperidad económica, el
bienestar social, la realización personal, y para ayudar a asegurar
un planeta más sostenible.
Efectivamente, el aprendizaje es esencial para el futuro de nuestro
mundo y, sin embargo, nuestros sistemas educativos actuales se
enfrentan a desafíos sin precedentes. No podemos renunciar al poder
de la red para conectar e involucrar a los estudiantes y educadores
por igual, y para facilitar el acceso a tantos nuevos recursos
colectivos y de conocimiento.
Los sistemas educativos tradicionales por sí solos, a pesar del
papel esencial que han desempeñado y podrán seguir desempeñando en
el aprendizaje, no son capaces por sí solos de servir de
crecimiento del conocimiento y atender a las necesidades de la
humanidad. Esta es la tesis que mantiene el mencionado informe,
cuyas principales ideas resumimos en estas líneas.
A pesar de haber realizado un aceptable papel, incluso los sistemas
de más alto rendimiento nunca serán capaces de satisfacer la
creciente y cambiante demanda mundial para aprender en la
actualidad, si no modifican sus estrategias. Las prácticas
empleadas hasta ahora no son suficientes. El aprendizaje no es ya
una actividad ni un lugar y va más allá de la escuela y la
universidad.
La explosión del conocimiento impulsado por el poder de la red para
conectar a las personas y difundir ideas, ha cambiado la propia
naturaleza del aprendizaje. Hay que innovar y desarrollar nuevos
modelos, tanto formales como informales, que cumplan con las
exigencias de las sociedades basadas en el conocimiento en esta era
de la información, señalaba el referido informe.
Tenemos que adoptar nuevos rumbos a partir de fuentes no
tradicionales y fomentar la innovación para que podamos
anticiparnos a las necesidades de los estudiantes en el mundo que
les rodea en la actualidad. Las personas necesitan aprender y
volver a aprender durante toda su vida, como hemos indicado en
nuestras colaboraciones anteriores sobre el aprendizaje de las
personas mayores. Aun así, el aprendizaje debe centrarse cada vez
más en la colaboración interdisciplinar y en las habilidades
propias del siglo XXI, como el pensamiento crítico y la resolución
de problemas.
El futuro de la educación está en red. Las personas deberemos
colaborar mucho más para crear y compartir conocimientos, así como
desarrollar nuevas formas de enseñanza y aprendizaje que atraigan
la atención y la imaginación de los estudiantes en cualquier lugar,
en cualquier momento y con cualquier dispositivo.
"Satisfacer las necesidades cambiantes de los estudiantes durante
toda su vida es el reto más importante y es más apremiante que
nunca", afirmaba John Chambers, presidente de Cisco Systems en
2010. Y su llamada continúa teniendo la misma urgencia en estos
momentos. Pero ahora hay que verla como una gran oportunidad y una
de nuestras mayores obligaciones respecto de las generaciones
futuras. Conectar y capacitar a alumnos y educadores permitirá
acelerar el crecimiento económico y mejorar el bienestar social en
todo el mundo.
El informe que glosamos no pretende definir todas las estrategias,
sino más bien estimular un diálogo global entre los que defendemos
el poder de la educación para transformar todas las sociedades.
Para ello será necesario "pasar de los sistemas educativos a la
Sociedad del aprendizaje". Esto significa que tenemos que
replantear todo nuestro enfoque sobre el aprendizaje: la forma en
que lo concebimos, organizamos, financiamos y desenvolvemos en
escuelas y universidades tradicionales.
Florentino Blázquez Entonado
Catedrático de Didáctica Emérito de la Universidad de Extremadura